TESTIMONIOS
Andrea, 56 años
"Siempre en mi vida me sentí feliz y tranquila la mayor parte, pero viví una etapa de mucho dolor que nunca pensé que la viviría y menos aún que la pudiera superar. A mi madre le diagnostican de repente una enfermedad avanzada y muere muy rápido. Mi hija sabiendo que existía este tremendo amor, sabía que iba a ser muy difícil para mi pasarlo sin ayuda. Me pidió hora con Macarena aún sabiendo que yo soy reacia a los psicólogos, pero me dijo que ella era diferente y que yo podría confiar con más facilidad. Y tenía razón, de sentirme muy desolada, me empecé a sentir apoyada y comprendida, pasé de esta sensación de pérdida tremenda a sentir que estoy siempre acompañada de su recuerdo, de su amor, de mi familia, y de mí misma, ya que llevo dentro de mí su esencia. Así finalmente puedo decir que gracias a Macarena retomé mi camino de alegría y amor."
Josefina, 19 años
"Crecí pensando que estresarme toda mi época escolar para alcanzar las mejores notas, luego estudiar la mejor carrera, y conseguir el mejor trabajo me permitiría alcanzar la felicidad. Pero vivir bajo esa presión tan grande se volvió mi sufrimiento diario. Fue así como llegué a la Maca. Ella cambió mi vida. Me mostró otra perspectiva de la vida. Me enseñó a tratarme de una manera más amorosa y compasiva, a cuestionar los estándares impuestos y dejarlos atrás. Me permitió perdonar, perdonarme, agradecer, y dejar ir situaciones pasadas. Me condujo para volver a re conectar con la esencia divina para poder mirar hacia mi interior y sanar. Me inspiró a disfrutar del camino, a mirar todo como una nueva oportunidad de aprendizaje. Y sobre todo también, a seguir siempre el propósito de mi corazón. Voy a estar eternamente agradecida de todo lo que me brindó esta experiencia junto a ella en este momento de mi vida. "
Camila, 28 años
"Siento que no hay palabras suficientes para describir la importancia del apoyo que Maca me ha entregado estos últimos meses. Un amigo muy cercano y psicólogo me recomendó a Maca cuando le pedí el contacto de alguien que fuera 'de mi onda'. ¿A qué me refería con esto? A alguien abierta de mente, que en lugar de juzgar la manera que tengo de ver la vida, pudiera recibirme y acompañarme en el proceso en el que estaba en ese momento. Maca desde el primer momento ha sido receptiva a mis necesidades y visiones del mundo y la vida, ha sido capaz de proveerme con el espacio, la comprensión, y la compasión que he necesitado para atravesar mi proceso. Su enfoque es integral, por lo que me ha apoyado con diversas herramientas que a mi me hacen sentido, siempre tomando en cuenta mis necesidades personales. Le agradezco infinitamente a Maca por ser tan auténtica conmigo y estar al servicio de mi bienestar. La recomiendo a ojos cerrados, y a corazón abierto."
Catalina, 24 años
"Viví una situación muy dura y estaba pasando por un periodo muy difícil para mi, es por eso que el primer día de sesión iba con muchas dudas, prejuicios, temores y ansias de saber cómo alguien me podría
ayudar sin siquiera conocerme. La Maca me transmitió calma, fue muy empática y cariñosa, me comprendió y ayudó a mejorar cada día, me volvieron las ganas de disfrutar la vida. Las sesiones iban acompañadas de tareas, herramientas prácticas, estrategias y de apoyo fuera de la sesión en caso que lo necesitara.
Trabajamos sobre el amor propio y las batallas internas que había
vivido de pequeña, comprendí que no es necesario cargar
una mochila tan grande y pesada, menos sola. Pude ir más allá de mis miedos e inseguridades, reconocerme, re-enamorarme de mí, de mi esencia, de lo que soy realmente. Estoy muy
agradecida de poder contar con una profesional como la Maca."
Maira, 25 Años
El tratamiento psicológico de Maca me ha ayudado mucho a avanzar en mi proceso de sanación, me parece que una terapéutica integral feminista y vegana nos pone de partida en la misma posición y a partir de ahí comenzamos juntas el camino hacia integrar la luz y la sombra. A veces siento que la Maca tiene las palabras precisas y justas que necesito para cada momento y eso siempre me sorprende gratamente. Estoy muy agradecida y me siento afortunada de tener una compañera tan maravillosa en el camino de la sanación. Le dedico el siguiente poema:
La terapia con la maca es como
Un algodon de azúcar
Golpe de realidad
Un abrazo de abuela
Una cascada de colores
Un tecito de jengibre en invierno
Una geoda de cuarzo rosa
Un perrito de la playa
Una bola de la fortuna
El cine de ayer y hoy
Un hágalo usted mismo
Un huevito de color azul
El pasto recién regado
Una danza tribal
La manzanilla recién cortada
Tomarle la mano a mis amigas
El sillón más cómodo de la casa
Un espacio seguro
Dentro y fuera mío